Mujer acosa a un compañero de trabajo y asegura esperar un hijo suyo, se hace un ADN y el resultado no nos sorprende

Partagez:

Mujer acosa a un compañero de trabajo y asegura esperar un hijo suyo, se hace un ADN y el resultado no nos sorprende

El acoso laboral es un asunto muy serio que ocurre mucho más seguido de lo que quizás imaginamos. Ahora, puede que en lo primero que pensemos todos nosotros sea en un hombre acosando a una mujer, la típica escena del jefe abusando de su poder con su secretaria. Pero, ¿qué pensamos cuando es una empleada la que acosa a su jefe? Esto es lo que ocurrió en esta historia que ahora circula vertiginosamente por las redes. Es imperdible y está contada en primera persona por una de las protagonistas: la esposa del acosado. Léela y luego dinos si no parece el guion de una famosísima película ochentosa.

© Fatal Attraction / Paramount Pictures

Mi esposo ocupa un alto cargo en el departamento de marketing de la empresa donde trabaja. Cada vez que comienza un proyecto, tiene reuniones con equipos de otras áreas, cuanto más grande es el proyecto, más reuniones se necesitan. Por este motivo él comenzó a trabajar con una colega que había sido muy recomendada por un empleado senior del equipo de eventos. Es cierto que se mostró amistoso con ella, pero siempre desde un lugar profesional; ni siquiera sus reuniones eran a solas.

Fue justo antes de Navidad que ella comenzó a actuar de manera extraña. Buscaba excusas constantemente para hablar con mi esposo, le pedía discutir asuntos de trabajo durante el café y el almuerzo y hasta usaba el correo electrónico laboral para mostrarle su obsesivo interés con mensajes del estilo: “Qué bien te ves hoy”.

© Fatal Attraction / Paramount Pictures

Cuando nos cruzamos en la fiesta de Navidad de la empresa, su enojo por no poder estar a solas con mi esposo era evidente. Fue unos días después que ella le mandó la primera foto a través de las redes sociales. Supuestamente la había enviado por error, era una foto de ella bastante provocativa. Cuando él llegó a casa y revisó su computadora, tenía un mensaje suyo que decía: “Ups, lo siento, persona equivocada”, pero la imagen estaba allí.

Por si quedaban dudas de que su “error” no era más que una farsa, una semana después le envió una segunda foto, aun más provocativa, a una red social diferente. Esta vez fue mi propio esposo quien me pidió que la abriera apenas vio su nombre en el mensaje. Ni siquiera la tenía de amiga en las redes sociales, ¿cómo pudo haber pensado que podía creerle semejante mentira?

© Fatal Attraction / Paramount Pictures

La tensión fue creciendo hasta que una noche, cuando mi esposo y yo estábamos entretenidos organizando una cena para amigos, se apareció en la puerta de mi casa. Al borde del llanto, me dejó una pila de papeles con una larguísima conversación que ellos supuestamente habían mantenido por WhatsApp.

Me habló durante 5 minutos en los que me contó cuánto amaba a mi esposo, me aseguró que ella no quería lastimarme pero que “el corazón quiere lo que quiere” y me pidió que lo dejara, que me fuera de la casa. Solo atiné a quedarme en silencio y mirarla fijo hasta que se sintió lo suficientemente cohibida como para dar la vuelta e irse por donde había venido.

Cuando mi esposo apareció en la puerta creyendo que iba a salvarme de un vecino hablador, le di la “evidencia” de su colega. Lo leímos juntos y ya en la segunda hoja me di cuenta de que todo era falso. No era la forma de escribir de él, los errores de ortografía eran horrores y hasta el número que figuraba como su teléfono era falso. Fue en ese momento que mi esposo decidió ponerle un freno definitivo y al día siguiente la denunció en el área de Recursos Humanos de la empresa.

(Visited 1 times, 1 visits today)
Partagez:

Articles Simulaires

Partager
Partager